Montes submarinos, cruciales en la predicción del clima
Investigadores
han descubierto que el agua de mar en el océano cerca de la Antártida
se mezcla intensamente a medida que se precipita sobre las montañas
submarinas en el Pasaje de Drake, el
entre el extremo sur de América del Sur y el continente antártico, algo
que resulta crucial en la regulación del clima de la Tierra y las
corrientes oceánicas, según publica la revista 'Nature'.
La
investigación, realizada por expertos de las universidades de Exeter,
East Anglia y Southampton, todas en Reino Unido, y la Institución
Oceanográfica Woods Hole, del 'British Antarctic Survey' y de la
Asociación Escocesa de Ciencias Marinas, proporciona una visión de los
modelos climáticos que hasta ahora han carecido de la información
detallada sobre la mezcla del océano necesaria para proporcionar
proyecciones precisas del clima a largo plazo.
En
el análisis de algunas de las aguas más salvajes del planeta, los
investigadores midieron la mezcla en el Océano Austral mediante la
liberación de pequeñas cantidades de un trazador químico inerte en el
Pacífico Sudeste y lo siguieron durante varios años hasta que atravesó
el Pasaje de Drake para observar la rapidez con que se mezcla el océano.
El
indicador no mostró casi ninguna mezcla vertical en el Pacífico pero a
medida que el agua pasa sobre el fondo del mar montañoso en la distancia
continental relativamente estrecha que forma el Pasaje de Drake comenzó
a mezclarse de forma espectacular.
En
palabras del profesor Andrew Watson, de la Universidad de Exeter
(anteriormente en East Anglia), "es crucial conocer profundamente los
procesos de mezcla en el océano para entender el sistema climático
global. Nuestro estudio indica que prácticamente toda la mezcla en el
Océano Antártico se produce en el Pasaje de Drake y en algunos otros
lugares montañosos submarinos. Nuestro estudio proporcionará a los
científicos del clima información detallada sobre los océanos de la que
actualmente carecen".
La
mezcla del océano transfiere dióxido de carbono de la atmósfera a las
profundidades del mar y, en última instancia, controla la velocidad a la
que el océano absorbe el dióxido de carbono. Durante varios cientos de
años, este proceso eliminará gran parte del dióxido de carbono que
liberamos a la atmósfera, almacenándolo en las profundidades del océano.
La mezcla oceánica también afecta al clima, por ejemplo, un aumento en
la tasa de aguas profundas en la mezcla permitiría al océano llevar más
calor hacia los polos.
Los científicos creen que las concentraciones más bajas de dióxido de carbono en la atmósfera durante las edades de
pueden haber sido el resultado de una mezcla oceánica más lenta entre
la superficie y las profundidades del mar. Aunque las razones de esto no
están claras, acentúa aún más el vínculo entre la mezcla en el océano y
el clima.
18/09/13
EUROPA PRESS
No hay comentarios:
Publicar un comentario