A su juicio, este plan para recuperar la especie, cuyo stock se encuentra al 30 por ciento, debería establecer límites de capturas y regular la pesquería a través de totales admisibles de capturas (TAC); aplicar medidas de control y vigilancia para combatir la sobrepesca; proteger los juveniles de pez espada mediante un incremento de la talla mínima y vedas temporales.
Además insta a proteger especies vulnerables capturadas accidentalmente en las pesquerías de pez espada.
En este contexto, reclama a los Estados de la UE que tomen las riendas y establezcan un plan de acción sólido. La ONG apoya la abrumadora petición de los científicos para combatir con firmeza la sobrepesca que sufre el pez espada en el Mediterráneo. Los científicos de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) han realizado este llamamiento en la reunión para evaluar este stock que concluyó el sábado pasado en Casablanca (Marruecos).
El encuentro ha confirmado que las medidas actuales para reducir la sobrepesca son laxas, inadecuadas y sin visión a largo plazo. El pez espada sigue siendo una de las especies que más se pescan en el Mediterráneo y, debido a la falta de una gestión adecuada, no hay señal ninguna de una posible recuperación a corto plazo.
Según ICCAT, la organización internacional encargada de la conservación de atunes y especies afines, el pez espada está en su punto más bajo en el Mediterráneo: representa tan solo un 30% del stock que existía hace 30 años.
"Es hora de detener la sobrepesca y recuperar los stocks de pez espada. Tres décadas de sobrepesca son suficientes", afirma el director ejecutivo de Oceana en Europa, Lasse Gustavsson, que considera que seguir posponiendo un plan de recuperación "haría tambalearse el futuro de los pescadores y las localidades cuyo modo de vida depende de una pesquería saludable de pez espada".
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