viernes, 27 de septiembre de 2013

Localizan dos especies amenazadas de coral en las Islas Medes



Localizan dos especies amenazadas de coral en las Islas Medes

Biólogos de Submon, especialistas en la conservación, el estudio y la divulgación del medio marino, han localizado en el Parque Natural del Montgrí, las Islas Medes y el Baix Ter varias colonias de dos especies amenazadas de coral.
 
Gerona (España) | El proyecto de estos biólogos ha consistido en realizar inmersiones de exploración para localizar dos especies en regresión, el falso coral negro (Savalia Savaglia) y la Madrépora Mediterránea (Cladocora caespitosa). La relevancia de su localización radica tanto en su escasez como en que son detectores del cambio climático.
El falso coral negro es poco frecuente, endémico del mar Mediterráneo y forma colonias arborescentes de color amarillento que pueden alcanzar hasta 2 metros de longitud. Se caracteriza también por tener un crecimiento muy lento y poder llegar a vivir hasta 2.000 millones de años.  Por su parte, la Madrépora Mediterránea tiene el esqueleto calcáreo, forma estructuras globosas y redondeadas de color verdoso que pueden llegar a tener 1 metro de diámetro.  Su localización es importante porque están cambiando y desapareciendo por efectos del cambio climático.
Tras sumergirse por una docena de zonas de buceo de las Medes, hasta un máximo de 30 metros, los biólogos han localizado sólo 2 colonias de falso coral negro, las dos a poca distancia y en la zona del Salpatxot.
Los técnicos de Submon responsables del proyecto, Jordi Sánchez y Manel Gazo, consideran que, por su escasez, esta especie "se debería incorporar a los programas de seguimiento del patrimonio natural de las Illes Medes y establecer un protocolo específico de control y seguimiento".
De Madrépora se han localizado 19 colonias repartidas en 8 rutas de inmersión, entre ellas las conocidas como el Cavall Bernat o el Dofí nort y sud.  Al ser un buen indicador del efecto del incremento de la temperatura del agua debido al cambio climático, consideran que "sería conveniente incorporar esta especie a los programas de seguimiento periódico".
Una de las características pioneras de este estudio es que se ha instruido a los monitores de buceo de los clubes que hacen inmersión en esta localidad para reconocer estas especies en caso que las localicen.  De esta forma, aunque el proyecto técnico ya ha finalizado, puede seguir activa la aportación de los buceadores sobre los efectos del cambio climático en las colonias.
El proyecto ha contado con un presupuesto de 18.750 euros, de los que 13.312 euros han sido financiados por Medpan, red de gestores de las Áreas Marinas Protegidas del Mediterráneo que lucha por mejorar la eficacia de la gestión de estas áreas en beneficio del medio ambiente marino, y el resto por el Parque.
Este proyecto se empezó a redactar en el 2011 con el responsable del Parque en ese momento, Àlex Lorente, fallecido el año pasado durante una inmersión, y ha sido el único "small proyect 2012" de Áreas Marinas Protegidas (AMP) de España que ha sido financiado por Medpan.
La técnica responsable del Parque, Mapi Carbús, ha valorado positivamente este proyecto "porque es la primera vez que se colabora con los centros de buceo en un proyecto concreto para ser científicamente validado".
Además ha destacado que "el patrimonio biológico de las Medes es tan grande, que a veces falta información de algunas especies".

Confirman nuevo museo submarino en Quintana Roo



Confirman nuevo museo submarino en Quintana Roo 

El proyecto contempla la colocación de 15 mil esculturas y 12 mil 50 urnas funerarias, bajo el agua de Isla Mujeres.

Las esculturas serán planas y tendrán múltiples huecos con la finalidad de atraer a las especies y peces. 

Stephani Blanco - Cancún, Q.Roo.| El proyecto de Ofrendas Submarinas, que contempla la colocación de 15 mil esculturas y 12 mil 50 urnas funerarias en un espacio de 20 hectáreas de forma circular bajo el agua de Isla Mujeres, un atractivo similar al Museo Subacuático de Arte, tiene el visto bueno de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
La autorización señala que el plan cuenta con 10 años para la instalación de las esculturas y 50 años para la operación y mantenimiento del mismo, de acuerdo con la resolución con fecha del 16 de agosto y publicada en la Gaceta Ecológica de la Semarnat del 29 de agosto.
De acuerdo con el proyecto presentado por el promovente Héctor Humberto González González, lo que se busca es incrementar el ecoturismo y el turismo cultural, así como un espacio en el que las cenizas sean generadoras de nueva vida marina y permitirá el paso de yates y lanchas.
Las esculturas serán planas y tendrán múltiples huecos con la finalidad de atraer a las especies y peces, que además logran adherir más rápido la vida en los muros. El proyecto Ofrendas Submarinas se localizará fuera del polígono del Parque Marino Nacional en dirección de la salida de Puerto Cancún hacia Isla Mujeres.
Las Ofrendas Submarinas buscan el mercado de buceo amateur, ya que en la zona no se dañan los arrecifes naturales, además de atraer mayor turismo a la zona y ofertar servicios turísticos complementarios que generen empleos. El proyecto estará listo para el año 2025. Serán dos etapas de construcción. Se pretende que arranque este año y finalicen para el 2015.
Para su construcción se deberá elaborar un programa de monitoreo y vigilancia ambiental durante la etapa de colocación de las esculturas, así como un programa de manejo integral de residuos sólidos. La Semarnat pidió al promovente del proyecto el monitoreo y control del pez león; el primer informe que deberán presentar los promoventes será dentro de seis meses, aunque aún no inicie el proyecto.


El CSIC vigilará la contaminación del mar con sensores instalados en miniboyas



El CSIC vigilará la contaminación del mar con sensores instalados en miniboyas

Y gracias a un minicatamarán controlado de forma remota y dotado de energía por paneles solaresLos proyectos «Sea on a chip» y «Braavoo» forman parte de la última convocatoria del VII Programa Marco de la Unión Europea 

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) participarán en dos proyectos europeos recién aprobados -«Sea on a chip» y «Braavoo»- para vigilar la contaminación del mar. 

El primero de ellos desarrollará un sistema de control basado en una red de chips sensores miniaturizados que quedarán fijados en el perímetro de las piscifactorías. Está liderado por Damià Barceló, profesor de investigación del CSIC en el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA). Marinella Farré, también del IDAEA, será su gestora. 

Farré ha avanzado que «la intención es que los chips vayan sobre unas miniboyas (del tamaño de un tercio de un paquete de tabaco), que contarán con los componentes electrónicos necesarios para la recepción y transmisión de datos, con su propia fuente de energía y con los reactivos necesarios para el análisis de los compuestos contaminantes más representativos (desde toxinas naturales procedentes de floraciones algales naturales hasta contaminantes emergentes, como los compuestos polibromados o antibióticos)». 

«Sea on a chip» está dotado con un presupuesto de más de 5,5 millones de euros y colaboran en él el Instituto de Química Avanzada de Cataluña (IQAC) el Instituto de Ciencia de Materiales de Barcelona (ICMAB) y 17 socios más de 9 países. 

Central de recogida de datos
«Braavoo», por su parte, busca desarrollar un laboratorio flotante instalado en un minicatamarán totalmente autónomo y dotado de energía por paneles solares, según ha informado el CSIC en un comunicado. 

El sistema se controlará de forma remota y los resultados analíticos obtenidos a lo largo del recorrido se enviarán a una central de recogida de datos. 

El proyecto prevé dotar al catamarán con diferentes biosensores: por un lado inmunosensores ópticos, que son extremadamente precisos en la detección de contaminantes diana, y por otro sensores basados en células bacterianas para la determinación de contaminantes como el mercurio. 

El IDAEA y el Centro de Investigación en Nanotecnología y Nanociencia (CIN2) dispondrán de la ayuda de 3,5 millones de euros y de 9 socios de 7 países (Alemania, España, Holanda, Irlanda, Israel, Italia y Suiza).

PharmaMar estudia tres nuevos compuestos contra el cáncer



PharmaMar estudia tres nuevos compuestos contra el cáncer
Ayudarán a luchar contra la enfermedad en sangre, ovarios y pulmones.   La investigación en biotecnología marina es la base del trabajo en el laboratorio de Pharmamar.
M. Alfonso | El cáncer de sangre, el de pulmón o el ovarios podrían tener nuevos tratamientos. Tres son los compuestos que PharmaMar ha logrado aislar y en los que ha encontrado evidencias de su valor en la lucha contra la enfermedad. La filial de Zeltia dio a conocer las propiedades de estas moléculas, todavía en fase de estudio, en el marco del simposio internacional de productos naturales marinos que se celebra en A Toxa. Científicos de 38 países diferentes aprovechan esta cita para dar a conocer los últimos avances en biotecnología marina y demostrar que en el mar puede estar la cura a enfermedades como el alzhéimer, la tuberculosis o la diabetes.
La primera jornada de esta importante cita se centró en presentar los compuestos marinos que hoy son ya medicamentos. Yondelis, el primer antitumoral de origen marino elaborado por Zeltia, y la eribulina, otro compuesto desarrollado por el laboratorio japonés Eisai -destinado a luchar contra el cáncer de mama metastásico- son ejemplos del éxito de la investigación en biotecnología marina. Pero en este campo queda todavía mucho por hacer.
PharmaMar explicó que, actualmente, está investigando otros tres compuestos que han demostrado su eficacia en la lucha contra el cáncer, y, además, tiene un cuarto que en breve llegará a los mercados. El Aplidin, destinado a combatir el mieloma múltiple ha logrado ya parte de los permisos de la Comisión Europea y de la Agencia Americana del Medicamento. Más tiempo habrá que esperar por el fármaco a base de pipecolidepsin, una molécula en la que la compañía ha puesto muchas esperanzas, pues «los primeros datos en el laboratorio han demostrado una muy buena actividad antitumoral en distintos tipos de cáncer hematológico y en tumores sólidos como los cánceres de colon, mama, próstata y pulmón», explican en la firma.
La lista de investigaciones la cierran otros dos compuestos que por ahora no tienen nombre comercial. Son el PM01183 y el PM060184. El primero está pensado para combatir el cáncer de ovario resistente a platino y ya se han presentado estudios que avalan su eficacia. El segundo proviene de una esponja marina del océano Índico y ha demostrado que puede resultar válido contra el de cérvix y el de pulmón de células pequeñas. Precisamente, el aislamiento, la síntesis y el desarrollo preclínico de esta molécula centran una de las ponencias del congreso de A Toxa.
Según la directora del simposio, Carmen Cuevas, los investigadores han descubierto en el mar miles de moléculas, de las cuales solo unos cientos cuentan con capacidades terapéuticas. Pero aislarlas y sintetizarlas son tareas complejas y llevan mucho tiempo. Hay numerosos estudios en fase inicial que se darán a conocer en el congreso y que buscan combatir otras enfermedades, como el alzhéimer.

OIEA propone tecnología nuclear para combatir acidificación de los océanos


OIEA propone tecnología nuclear para combatir acidificación de los océanos
La acidificación sucede cuando el dióxido de carbono se disuelve en el agua, provocando que el pH marino descienda, como resultado, muchas especies cuando todavía son jóvenes, corren el riesgo de no poder adaptarse y cualquier descenso en su población puede afectar a todo el ecosistema marino.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) decidió impulsar el desarrollo de nuevos métodos de tecnología nuclear para combatir la acidificación de los océanos, una de las principales amenazas del ecosistema marino.

OIEA  propone tecnología nuclear para combatir acidificación de los océanos
La acidificación sucede cuando el dióxido de carbono se disuelve en el agua, provocando que el pH marino descienda, como resultado, muchas especies cuando todavía son jóvenes, corren el riesgo de no poder adaptarse y cualquier descenso en su población puede afectar a todo el ecosistema marino.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) decidió impulsar el desarrollo de nuevos métodos de tecnología nuclear para combatir la acidificación de los océanos, una de las principales amenazas del ecosistema marino.
La acidificación es causada por el aumento de la concentración de dióxido de carbono (CO2) en el agua, razón por la cual, los científicos proponen el uso de isótopos radiactivos para diagnosticar mejor la situación.
OIEA reunió en Viena (Austria), con motivo de su 57 conferencia general, a científicos de todo mundo para analizar los más recientes avances en sus investigaciones sobre esta amenaza, que estuvo desapercibida.
El director de los laboratorios medioambientales del OIEA en Mónaco (Italia), David Osborn, dijo que "Con los isótopos de Boro y otras tecnologías somos capaces de marcar sedimentos para saber y conocer datos de los esqueletos de coral".
Según Osborn, esta técnica permite saber lo que ocurrió con estos organismos del océano en el pasado, algo que es útil para "predecir qué podría suceder en el futuro".
Resaltó que con la tecnología nuclear se supo que todas las aguas, en todas las latitudes, se han vuelto más ácidas y contienen niveles diferentes de saturación de calcio.
El científico indicó que cuando el dióxido de carbono se disuelve en el agua, provoca que el pH marino descienda, por lo que las aguas del mar se vuelven más ácidas.
Como consecuencia, muchas especies, especialmente las que necesitan grandes cantidades de calcio cuando todavía son muy jóvenes, corren el riesgo de no poder adaptarse y cualquier descenso en su población puede afectar a todo el ecosistema marino.
Los estudios sobre la acidificación son pocos y el tema es todavía desconocido para muchos científicos. “Sabemos qué la provoca y el porqué, pero todavía no sabemos cómo va a evolucionar", dijo Osborn.
De acuerdo a los datos disponibles, el crecimiento de la acidificación desde la época de la industrialización (siglo XIX) hasta la fecha es la más alta en los últimos 800 mil años.




La acidificación es causada por el aumento de la concentración de dióxido de carbono (CO2) en el agua, razón por la cual, los científicos proponen el uso de isótopos radiactivos para diagnosticar mejor la situación.
OIEA reunió en Viena (Austria), con motivo de su 57 conferencia general, a científicos de todo mundo para analizar los más recientes avances en sus investigaciones sobre esta amenaza, que estuvo desapercibida.
El director de los laboratorios medioambien
OIEA propone tecnología nuclear para combatir acidificación de los océanos
La acidificación sucede cuando el dióxido de carbono se disuelve en el agua, provocando que el pH marino descienda, como resultado, muchas especies cuando todavía son jóvenes, corren el riesgo de no poder adaptarse y cualquier descenso en su población puede afectar a todo el ecosistema marino.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) decidió impulsar el desarrollo de nuevos métodos de tecnología nuclear para combatir la acidificación de los océanos, una de las principales amenazas del ecosistema marino.
La acidificación es causada por el aumento de la concentración de dióxido de carbono (CO2) en el agua, razón por la cual, los científicos proponen el uso de isótopos radiactivos para diagnosticar mejor la situación.
OIEA reunió en Viena (Austria), con motivo de su 57 conferencia general, a científicos de todo mundo para analizar los más recientes avances en sus investigaciones sobre esta amenaza, que estuvo desapercibida.
El director de los laboratorios medioambientales del OIEA en Mónaco (Italia), David Osborn, dijo que "Con los isótopos de Boro y otras tecnologías somos capaces de marcar sedimentos para saber y conocer datos de los esqueletos de coral".
Según Osborn, esta técnica permite saber lo que ocurrió con estos organismos del océano en el pasado, algo que es útil para "predecir qué podría suceder en el futuro".
Resaltó que con la tecnología nuclear se supo que todas las aguas, en todas las latitudes, se han vuelto más ácidas y contienen niveles diferentes de saturación de calcio.
El científico indicó que cuando el dióxido de carbono se disuelve en el agua, provoca que el pH marino descienda, por lo que las aguas del mar se vuelven más ácidas.
Como consecuencia, muchas especies, especialmente las que necesitan grandes cantidades de calcio cuando todavía son muy jóvenes, corren el riesgo de no poder adaptarse y cualquier descenso en su población puede afectar a todo el ecosistema marino.
Los estudios sobre la acidificación son pocos y el tema es todavía desconocido para muchos científicos. “Sabemos qué la provoca y el porqué, pero todavía no sabemos cómo va a evolucionar", dijo Osborn.
De acuerdo a los datos disponibles, el crecimiento de la acidificación desde la época de la industrialización (siglo XIX) hasta la fecha es la más alta en los últimos 800 mil años.



tales del OIEA en Mónaco (Italia), David Osborn, dijo que "Con los isótopos de Boro y otras tecnologías somos capaces de marcar sedimentos para saber y conocer datos de los esqueletos de coral".
Según Osborn, esta técnica permite saber lo que ocurrió con estos organismos del océano en el pasado, algo que es útil para "predecir qué podría suceder en el futuro".
Resaltó que con la tecnología nuclear se supo que todas las aguas, en todas las latitudes, se han vuelto más ácidas y contienen niveles diferentes de saturación de calcio.
El científico indicó que cuando el dióxido de carbono se disuelve en el agua, provoca que el pH marino descienda, por lo que las aguas del mar se vuelven más ácidas.
Como consecuencia, muchas especies, especialmente las que necesitan grandes cantidades de calcio cuando todavía son muy jóvenes, corren el riesgo de no poder adaptarse y cualquier descenso en su población puede afectar a todo el ecosistema marino.
Los estudios sobre la acidificación son pocos y el tema es todavía desconocido para muchos científicos. “Sabemos qué la provoca y el porqué, pero todavía no sabemos cómo va a evolucionar", dijo Osborn.
De acuerdo a los datos disponibles, el crecimiento de la acidificación desde la época de la industrialización (siglo XIX) hasta la fecha es la más alta en los últimos 800 mil años.


Llega la cosecha de la verdura marina

Llega la cosecha de la verdura marina

Dos firmas de Llanera y Llanes elaboran una gelatina para medicamentos y cosméticos a base de algas, ahora en plena época de recogida en puertos como el de Candás

Rubén Fernández y Julio Busto mostrando las algas que arrancaron en las profundidades del mar Cantábrico, en Candás.
Rubén Fernández y Julio Busto mostrando las algas que arrancaron en las profundidades del mar Cantábrico, en Candás.
José Artime lleva toda su vida dedicado al «arranque» del ocle. Pero como él hay muchas otras familias asturianas que tienen a las algas como su principal medio de vida. A pesar de que el trabajo es duro, esquivan la crisis, gracias a la subida del precio de esta planta.
Las algas son el gran desconocido del medio marino. Y eso a pesar de que su diversidad y cualidades las hacen susceptibles de ser utilizadas tanto en alimentación y agricultura como en cosmética y medicina. Un mundo aún por descubrir, al que se dedican muchas familias asturianas durante los meses de verano. Se trata de la campaña de recogida del ocle, un tipo de alga calcárea que se da en el ecosistema litoral de la región y que estos días siembra de olor marinero el puerto de Candás.
Hasta allí llegan a media tarde embarcaciones cargadas de kilos de estas plantas marinas, generalmente unos 10.000 por día, que luego son transportadas hasta los campos de secado. Pero antes de ello el trabajo ha sido más bien duro e, incluso, arriesgado, en especial para los buzos o ranas del ocle, encargados del arranque de estos organismos. A primera hora de la mañana ya ponen rumbo a altamar para sumergirse en las profundidades. Allí los buzos permanecen hasta más de cinco horas soportando altos niveles de presión. Por eso, no es de extrañar que sea muy «cansado y peligroso. Te estás jugando la vida constantemente. Aun así no le tenemos miedo, sino respeto», dicen Rubén Fernández y Julio Busto, dos de los buzos que trabajan en el arranque del ocle y cuyo trabajo finaliza en el puerto.
Es, entonces, el momento de sacar las algas de los barcos y transportarlas en camiones a los campos de secado, tal y como explica José Artime, dedicado a la recogida del ocle (del 1 de julio al 30 de septiembre) desde hace años y propietario de seis barcos que esta temporada trabajan próximos a la costa de Carreño. «Las algas se tienen que dejar secar unos días, mientras que varios tractores les van dando vueltas. Tras ello, se empaquetan en rollos de unos 500 kilogramos y luego se venden a las fábricas por alrededor de 1,60 euros cada kilo en seco», comenta Artime. Esas fábricas, que, en Asturias, son fundamentalmente Industrias Roko, en Llanera, y Agar de Asturias, en Llanes, se encargan de fabricar el «agar agar», una gelatina vegetal, a partir de la cual se elaboran los medicamentos y cosméticos.
De hecho, la aplicación de las algas en la industria farmacéutica está muy extendida. Estos organismos fotosintéticos son muy utilizados en la medicina tradicional oriental y actualmente se emplean también para combatir ciertas enfermedades o alteraciones comunes, gracias a su alto poder gelificante, antitumoral, antioxidante y anticolesterol, entre otros. De igual modo, la cosmética también se beneficia de las bondades de las algas. Su materia se utiliza en todo tipo de productos para el tratamiento de uñas rotas, acné, arrugas, seborrea e, incluso, caída de cabello.
Aparte de todo esto, las algas también se utilizan para la agricultura, sobre todo en las zonas costeras. Los agricultores recolectan durante todo el año los arribazones -las algas depositadas en las playas por la fuerza de la marea- para usar como abono y fertilizante.
Pero el uso más conocido de las algas es, quizás, el alimenticio. De hecho, ya el hombre prehistórico supo apreciar sus propiedades y hoy en día hay muchas sociedades que las incorporan a su dieta habitual, convirtiéndose, así, en un alimento común y tradicional en cocinas como la asiática y la chilena. Sin embargo, no sucede lo mismo en España y en Asturias, donde este ingrediente pasa más bien desapercibido por los fogones. «Es un mundo aún por descubrir y al que los hosteleros de la región ven con cierto miedo. Pero yo les animaría a que se atrevieran a utilizar las algas en sus platos, porque no son difíciles de trabajar», asegura Marcos Morán, del restaurante Casa Gerardo, en Prendes (Carreño). Todo lo contrario, «se pueden utilizar o bien como verduras en menestras, salteados y guisos, o bien, como complementos gustativos en pescados», comenta Morán. Además de al natural, ya que las algas tienen grandes cualidades.
Los expertos destacan su gran riqueza en vitaminas y minerales, hoy escasos en los elementos más comunes de la dieta tradicional. Algunas, dependiendo del tipo, son ricas en proteínas, en fibras y fitocoloides, sustancias que actúan favoreciendo la movilidad intestinal y sacian, por lo que son adecuadas para dietas de adelgazamiento. Y por si fueran poco, encima son pobres en grasas e hidratos de carbono.
Actualmente se conocen unas 50.000 especies diferentes de algas, que constituyen un tercio de la biomasa del planeta. Esto les permite a los cocineros darles distintos medios de elaboración. Así, por ejemplo, como apunta Morán, una «lechuga de mar», mejor al natural, mientras que el alga «kombu», en caldos y cocidos. Pero las combinaciones son infinitas. Y en esto el mayor experto es la empresa gallega Porto Muiños, que ha sido la encargada de comercializar y extender el uso de las algas en la gastronomía española. Porque estos organismos, al fin y al cabo, son verduras. De mar, pero igualmente verduras.

Buscan 'agujeros negros' en el mar

Buscan 'agujeros negros' en el mar

Según investigadores de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich (ETH Zúrich) y de la Universidad de Miami (EE.UU.), algunos de los más grandes remolinos de la Tierra son matemáticamente equivalentes a los misteriosos agujeros negros del espacio.
En el norte de Europa se producen inviernos suaves gracias a la Corriente del Golfo, que forma parte de las corrientes oceánicas del mundo con efecto sobre el clima. Sin embargo, el clima también se ve influenciado por enormes remolinos de más de 150 kilómetros de diámetro que giran por el océano y por éste se mueven a la deriva.
El número de estos remolinos se ha incrementado en el Océano Antártico‎, aumentando el de aguas cálidas y saladas hacia el norte. Curiosamente, esto podría moderar el impacto negativo de la fusión del marino en un contexto climático más cálido. Sin embargo, los científicos no han sido capaces aún de cuantificar dicho impacto debido a que los límites exactos de estos cuerpos acuosos giratorios han resultado hasta ahora indetectables.
George Haller, profesor de Dinámica no lineal de la ETH Zúrich, y Francisco Berón-Vera, profesor de investigación oceanográfica de la Universidad de Miami, han llegado a una solución para este problema.

Esfera fotónica y esfera de agua
En un artículo publicado recientemente en el Journal of Fluid Mechanics, describen una nueva matemática para encontrar remolinos transportadores de agua con límites coherentes. El desafío en la búsqueda de estos remolinos es identificar islas de agua definidas, en medio de un océano turbulento. El movimiento rotatorio y sin rumbo del fluido parece caótico para el observador, tanto desde el interior como desde el exterior de los remolinos.
Pero Haller y Beron-Vera fueron capaces de establecer un orden en este caos mediante el aislamiento de estas islas de agua coherentes, a partir de una secuencia de observaciones realizadas por satélites. Para su sorpresa, dichos remolinos coherentes resultaron ser matemáticamente equivalentes a los negros del espacio, publica el ETH Zúrich. Un agujero negro es una región finita del espacio en cuyo interior existe una concentración de masa lo suficientemente elevada como para generar un campo gravitatorio tal que ninguna partícula material puede escapar de ella, ni siquiera la luz.
Pero, a una distancia crítica de un agujero negro, cualquier haz de luz dejará de girar hacia el interior del agujero. En lugar de eso, se doblará drásticamente para volver a su posición original, formando una órbita circular. La superficie formada por estas órbitas luminosas situadas alrededor de un agujero negro es denominada esfera fotónica. Lo que Haller y Beron-Vera han descubierto es que superficies cerradas similares se forman también alrededor de los remolinos oceánicos. En estas barreras, las partículas del fluido se mueven en bucles , siguiendo una trayectoria similar a la de la luz en una esfera fotónica. Como en un agujero negro, nada puede escapar de estos bucles.
Son precisamente estas barreras lo que ayudan a identificar remolinos oceánicos coherentes entre la gran cantidad de datos observacionales disponibles. Según Haller, el hecho mismo de que existan tales órbitas coherentes de agua en medio de las complejas corrientes oceánicas es sorprendente.

Otras similitudes
Como los remolinos oceánicos parecidos a los agujeros negros son estables, funcionan de la misma manera que un de transporte, no sólo para los microorganismos como el plancton o para los cuerpos extraños como los residuos plásticos, sino también para el agua con una temperatura y un contenido de sal que puede diferir de los del agua circundante.
Haller y Beron-Vera verificaron sus predicciones en los llamados remolinos de Agulhas, un grupo de remolinos oceánicos que fluyen a lo largo de la costa sureste de África y alrededor del extremo sur de África y que transportan agua salada y cálida. Los investigadores identificaron siete remolinos de Agulhas del tipo 'agujero negro', portando el mismo agua sin fugas durante casi un año.
Haller señala la existencia de vórtices coherentes similares, en otros flujos complejos no oceánicos. Por ejemplo, muchos torbellinos serían probablemente similares a los agujeros negros.
Incluso la Gran Mancha Roja, ‎ el mayor vórtice anticiclónico del planeta Júpiter, podría ser un espectacular ejemplo de esta similitud. "Los matemáticos han estado tratando de entender estos vórtices peculiarmente coherentes en flujos turbulentos desde hace mucho tiempo", explica Haller.

El papel de Edgar Allan Poe en el descubrimiento
Cabe destacar que la primera persona que describió los remolinos oceánicos como islas de agua coherentes fue, no un científico, sino el escritor estadounidense Edgar Allan Poe. En su relato Un descenso al Maelstrom‎, el autor se inspiró en el fenómeno del Maelström, un remolino que se produce en las costas de Noruega formado por la conjunción de las fuertes corrientes que atraviesan el estrecho de Moskenstraumen y la gran amplitud de las mareas.
Este cuento sirvió a su vez de inspiración a Haller y Beron-Vera, que vieron en la franja estable de espuma alrededor de un remolino descrita por Pound el equivalente oceánico a las esferas fotónicas, por lo que decidieron analizarla usando matemáticas sofisticadas.
Se espera que estos resultados ayuden a resolver diversos rompecabezas oceánicos relacionados con el clima o con la propagación de los patrones de contaminación del medio ambiente.
26/09/13
MADRI+D

Podría tomar décadas la recuperación del fondo marino en la zona del derrame de la “Deepwater Horizon” (EEUU)

Podría tomar décadas la recuperación del fondo marino en la zona del derrame de la “Deepwater Horizon” (EEUU)

Obtención de muestras a bordo del RV “Gyre”(FNM) Científicos de la Agencia Nacional del Océano y la Atmósfera de los EEUU (NOAA) publicaron los primeros análisis del impacto “post derrame” sobre el ecosistema de la zona lindera a la cabeza del pozo petrolero en donde se generó el desastre en 2010.
En un informe publicado en la revista científica PLoS , los investigadores estimaron que llevará décadas la recuperación del ecosistema de sedimentos de aguas profundas en las inmediaciones del área en la que se produjo la explosión de la cabeza de pozo y el subsecuente derrame en el Golfo de México.
El informe es el primero en proveer resultados exhaustivos de los efectos del derrame sobre las comunidades sedimentarias de aguas profundas de la base de la cadena alimentaria del Golfo, en su hábitat de lodos finos. Los estudios se concentraron en la variación temporal de la composición biológica y de parámetros químicos, en sitios predeterminados.
“Todavía no tenemos un cuadro completo”, explica Cynthia Cooksey, jefa científica de la campaña de primavera de 2011 que recogió datos en los mismos sitios que habían sido muestreados en el otoño de 2010. “Estamos en el proceso de análisis de los datos obtenidos en 2011, los que no estarán listos hasta dentro de un año, y que nos proveerán información sobre la esperable evolución futura”.
“Se nos ha asignado la tarea de determinar los impactos sobre el fondo marino atribuibles al derrame de petróleo de la plataforma Deepwater Horizon”, explica
El Dr. Paul Montagna, de la Universidad de Texas. “Hemos desarrollado una estrategia innovadora para combinar técnicas estadísticas clásicas comprobadas con modernas tecnologías de representación para crear un mapa de las huellas del derrame de petróleo”.
“Normalmente, cuando investigamos sitios de perforación petrolera costa afuera, encontramos polución en un de entre 300 y 600 yardas del sitio”, dice Montagna. “En este caso, la contaminación se extendió a casi dos millas de la boca del pozo, con impactos identificables a más de diez millas de distancia. El efecto sobre el fondo de la extensa pluma del derrame es algo que hasta el momento no había sido posible mapear. Este estudio muestra los devastadores efectos del derrame sobre el fondo mismo y demuestra el daño a importantes recursos naturales”.
“La enorme biodiversidad de la mesofauna en el área marina profunda del Golfo de México se ha visto reducida dramáticamente”, afirma el Dr. Jeff Baguley, de la Universidad de Nevada, experto en mesofauna,  pequeños invertebrados de tamaños entre 0.042 y 0.300 milímetros que viven en agua dulce y salada. “Los gusanos nematodos se ha constituido en el grupo dominante en los sitios muestreados impactados por el petróleo. De modo que aunque las cantidades totales de mesofauna pueden no haber cambiado mucho, lo que se ha perdido es la gran biodiversidad preexistente”.
El derrame y la pluma cubrieron casi 360 millas cuadradas, con el impacto más severo en términos de reducción de abundancia biológica y biodiversidad en un área de alrededor de nueve millas cuadradas alrededor del pozo, y con efectos más  moderados en 57 millas cuadradas alrededor. (MarEx)
27/09/13
FUNDACIÓN NUESTROMAR

Las lluvias se van desplazando al norte con el cambio climático

Las lluvias se van desplazando al norte con el cambio climático
 
  A medida que el Océano Atlántico Norte comenzó a agitarse con más fuerza, el hielo marino en el Ártico se fue derritiendo, estableciendo un contraste de temperatura con el Hemisferio Sur

Un desplazamiento hacia el norte de la eólica terrestre y los cinturones de lluvia podría crear una amplia franja de regiones secas, incluyendo Oriente Medio, el oeste de Estados Unidos y la Amazonia, además de promover el monzón en Asia y el clima tropical húmedo en África, según un nuevo estudio publicado en 'Proceedings of the National Academy of Sciences'. Los autores basan su predicción en el calentamiento de la Tierra tras la última glaciación, hace unos 15.000 años.

   A medida que el Océano Atlántico Norte comenzó a agitarse con más fuerza, el hielo marino en el Ártico se fue derritiendo, estableciendo un contraste de temperatura con el Hemisferio Sur, donde el hielo marino se expande alrededor de la Antártida. El gradiente de temperatura entre los polos parece haber empujado el cinturón de lluvias tropicales y la corriente media en chorro (el flujo de aire rápido y estrecho de las atmósferas de algunos planetas, en este caso la Tierra) de latitudes medias hacia el norte, redistribuyendo el agua en dos bandas en todo el planeta.

   Hoy en día, con el hielo marino del Ártico de nuevo en retirada, y el Hemisferio Norte calentándose más rápido que el Sur, la historia podría repetirse. "Si el tipo de cambios que vimos durante la deglaciación se produjeran hoy, tendrían un impacto muy grande", dijo el autor principal del estudio, Wallace Broecker, científico del clima en el Observatorio de la Tierra Lamont-Doherty de la Universidad de Columbia, en Nueva York, Estados Unidos.

   Con el cálculo de datos climáticos recogidos de todas partes del mundo, desde anillos de los árboles, hielos polares, formaciones de cuevas y sedimentos en lagos y océanos, Broecker y el coautor del estudio, Aaron Putnam, científico del clima en Lamont- Doherty, barajan la hipótesis de que los cinturones de viento y la lluvia se desplazaron hacia el norte entre hace 14.600 años y 12.700 años conforme el Hemisferio Norte se calentaba.

   En el extremo sur del cinturón tropical, el gran antiguo lago Tauca en los Andes bolivianos casi se secó en ese momento, mientras que los ríos en el este de Brasil se redujeron a una corriente de un hilo y las estalagmitas en la misma región dejaron de crecer. En las latitudes medias, el avance hacia el norte de la corriente en chorro puede haber provocado que el Lago Lisan, un precursor del Mar Muerto en el Valle del Rift de Jordania, redujera su tamaño, junto con varios lagos prehistóricos en zonas occidentales de Estados Unidos, incluido el lago Bonneville en la actual Utah.

   Mientras tanto, un desplazamiento hacia el norte de las lluvias tropicales recargó los ríos de la fosa de Cariaco, en Venezuela, y los lagos Victoria y Tanganyika, en el este de África. Las estalagmitas en la cueva Hulu de China se hicieron más grandes y la evidencia de un monzón asiático más fuerte durante este tiempo también se manifestó en los núcleos de hielo de Groenlandia.

   El proceso funcionó a la inversa desde aproximadamente 1300 hasta 1850, según barajan los autores, porque el norte de Europa pasó de una era medieval relativamente caliente a un periodo más frío conocido como la Pequeña Edad de Hielo. La circulación oceánica se desaceleró y el hielo marino en el norte del Océano Atlántico aumentó, como consta en los registros climáticos, mientras las precipitaciones del Monzón disminuyeron en Asia, dando lugar a una serie de sequías que se han relacionado con la disminución de la antigua civilización Khmer de Camboya, la dinastía china Ming y el colapso de los reinos de Vietnam, Myanmar y Tailandia.

   En el Hemisferio Sur, la reconstrucción de las extensiones de glaciares en los Alpes del Sur, en Nueva Zelanda, sugiere que las latitudes medias podrían haber sido más frías durante el periodo cálido medieval, respaldando la idea de que un contraste de temperatura entre los hemisferios altera los patrones de la lluvia y el viento.

MIGRACIONES ANUALES DEL VIENTO Y LA LLUVIA

   Una migración similar de los cinturones de viento y lluvia de la Tierra ocurre cada año. Durante el verano boreal, el cinturón tropical y la corriente en chorro de latitudes medias emigran hacia el norte conforme el Hemisferio Norte se calienta de manera desproporcionada por el sur, con más continentes que absorben la energía del sol. Cuando el Hemisferio Norte se enfría en invierno, los vientos y las lluvias vuelven al sur.

   A veces, los vientos y las lluvias se han reorganizado a sí mismos durante periodos más largos de tiempo. En los años 1970 y 1980, un desplazamiento hacia el sur del cinturón de lluvias tropicales, atribuido a la contaminación del aire de enfriamiento del Hemisferio Norte, se cree que llevó la devastadora sequía a la región africana del Sahel. Desde entonces, el cinturón de lluvias tropicales ha cambiado de nuevo y, según los autores del estudio, puede ser hacia el norte, como sugieren una serie de sequías recientes, en Siria, el norte de China, el oeste de Estados Unidos y el noreste de Brasil .

   De acuerdo con la investigación, al menos un modelo climático muestra el movimiento del cinturón de lluvias tropicales hacia el norte, con el aumento de los niveles de dióxido de carbono y el calentamiento de las temperaturas. "Es muy importante tener en cuenta el registro paleo --dijo Dargan Frierson, científico atmosférico de la Universidad de Washington, en Estados Unidos, cuyo trabajo de modelado apoya la hipótesis de los autores--. Esos cambios eran enormes, igual que los que estamos esperando con el calentamiento global".

   Los autores del estudio reconocen que su hipótesis tiene algunos agujeros. En el pasado, los cambios en la cubierta de hielo marino condujeron el gradiente de temperatura entre los dos hemisferios, mientras que hoy en día la culpa recae en el rápido aumento de las emisiones industriales de carbono. Hasta el momento, tampoco hay pruebas claras de que la circulación del océano está aumentando en el Atlántico Norte o que las lluvias monzónicas de Asia se estén fortaleciendo, pero se especula con que los aerosoles de sulfato producidos por la quema de combustibles fósiles pueden enmascarar este efecto.

Reinventan los patrones de distribución de la biodiversidad marina

Reinventan los patrones de distribución de la biodiversidad marina
 
Esto es lo que han llevado a cabo científicos de todo el mundo en el ámbito marino. Un reciente estudio publicado en la prestigiosa revista Nature

Desde que Darwin estudiara la evolución de las especies hasta la actualidad, los biólogos han empleado la misma metodología para medir la diversidad biológica de una región: el recuento de las especies. Aquellas zonas con una mayor biodiversidad son las que cuentan con un mayor número de especies distintas y reciben el nombre de hotspot o puntos calientes. Sin embargo, aplicando otros factores cuya medición es más compleja, como qué comen o dónde viven cada una de esas especies, se pueden establecer patrones distintos de biodiversidad.
Esto es lo que han llevado a cabo científicos de todo el mundo en el ámbito marino. Un reciente estudio publicado en la prestigiosa revista Nature, desvela la existencia de nuevos puntos calientes en las aguas templadas más alejadas de los trópicos.
"Nuestra aproximación va mas allá de la simple abundancia de especies", declara Mikel Becerro científico titular del Instituto de Productos Naturales y Agrobiología (IPNA) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), único participante español en el estudio.  El experto sostiene además que, atendiendo a otros factores, como el rol de cada especie en su ecosistema, emergen nuevos puntos con altos niveles de biodiversidad funcional.
El tratamiento de la información recogida en los mares de todo el mundo desvela que incorporando información de cómo comen, dónde viven o cómo se mueven los individuos de cada especie se puede aprender más sobre sus diferencias, uno de los pilares de la diversidad. "Es el primer estudio en incorporar datos sobre el funcionamiento de las especies de una manera tan comprensiva y este conocimiento extra nos dibuja un mapa global de biodiversidad muy diferente al que conocíamos hasta ahora”, asegura el investigador.

Una iniciativa con colaboración ciudadana
La investigación es producto de una iniciativa de 'ciencia ciudadana' donde la participación de buzos voluntarios en la recolección de datos ha hecho posible el registro de información procedente de un total de 1844 localidades, registrándose 2473 especies diferentes de peces.
La iniciativa se denomina Reef Life Survey (RLS) y nació en Australia liderado por el doctor Rick Stuart-Smith y el equipo de la universidad de Tasmania como voluntariado científico. Posteriormente se ha extendido por todo el mundo promoviendo la participación ciudadana en la recopilación de la información sobre los mares y el estado de las especies marinas que ha hecho patente la existencia de estos nuevos hotspot o puntos calientes de biodiversidad.
Según Becerro, "este programa no existiría sin el entusiasmo y la capacidad de sacrificio de los buceadores RLS que realizan un trabajo crítico para obtener un volumen de datos inabordable por equipos exclusivamente científicos”.
Gracias al tratamiento de la información suministrada por los buzos, los científicos han podido comprobar que, clásicos puntos calientes como el oeste del océano Pacífico se ven muy limitados en cuanto a diversidad funcional, mientras que, zonas escasas en cuantía de especies diversas como las islas Galápagos presentan una gran variedad de funciones llevadas a cabo por los individuos que pueblan sus aguas.

Canarias como Hotspot de biodiversidad
De forma inesperada, los datos recogidos por los buzos voluntarios en las aguas de Canarias han revelado que el archipiélago constituye una región con una alta diversidad funcional, en cuanto a especies marinas se refiere. Aunque no alcanza los niveles de otras zonas como las islas Galápagos, este dato viene a reforzar la necesidad de aumentar la protección de las especies canarias para evitar semejante pérdida de biodiversidad.
Asimismo, importantes puntos calientes en diversidad funcional se ven desprovistos de protección, sin tener en cuenta que la pérdida de especies en sistemas donde todas desempeñan funciones diferentes puede tener graves consecuencias ecológicas y sociales, pues se pueden perder muchos de los servicios que las especies proporcionan a nuestro bienestar.
"En definitiva, el estudio de RLS viene a demostrar la necesidad de continuar investigando el medio ambiente para conocer de primera mano qué está destruyendo la acción humana y qué necesita ser protegido", concluyen.

Iberdrola ingeniería impulsa el proyecto internacional de i+d hiwave, centrado en la energía de las olas

 
Esta iniciativa de carácter internacional tiene como objetivo crear un nuevo dispositivo de aprovechamiento de la energía de las olas con tecnología de control de última generación y diseñar, posteriormente, un parque marino basado en esta tecnología.


IBERDROLA INGENIERÍA, junto a la empresa sueca especializada en energías de las olas CorPower Ocean y el centro de investigación marina portugués WavEc, ha comenzado a desarrollar el proyecto de I+D+i HiWave, centrado en la energía de las olas de alta eficiencia.

Esta iniciativa de carácter internacional tiene como objetivo crear un nuevo dispositivo de aprovechamiento de la energía de las olas con tecnología de control de última generación y diseñar, posteriormente, un parque marino basado en esta tecnología.

En el marco de este ambicioso proyecto, CorPower será la responsable de diseñar el dispositivo, IBERDROLA INGENIERÍA se encargará de desarrollar el parque marino y WavEc apoyará el análisis y validación durante las distintas fases.

HiWave, cuya ejecución está previsto se extienda entre este año y 2016,  dispone de un presupuesto de 15 millones de euros, lo que lo convierte en una de las iniciativas más relevantes de estas características en el ámbito de las energías marinas.

Este proyecto está parcialmente financiado por el Instituto Europeo de Innovación (EIT) a través de una de sus comunidades de innovación y conocimiento (KIC-InnoEnergy).

Esta iniciativa consolida el firme compromiso de del Grupo, incluida su filial de ingeniería, con el fomento de la I+D+i. En la actualidad, IBERDROLA INGENIERÍA está trabajando en proyectos en los campos de las energías renovables, la eficiencia energética, la fusión nuclear, la captura de gases contaminantes o las redes inteligentes.

Asimismo, cabe destacar que el Grupo IBERDROLA es pionero en el desarrollo de iniciativas para el aprovechamiento de la energía marina. La base de su negocio en este sector es la energía eólica marina (offshore), en donde ya impulsa proyectos que suman más de 8.000 megavatios (MW).


Apuesta por las distintas energías marinas

IBERDROLA también impulsa proyectos en otras tecnologías marinas de futuro: la energía de las olas y la de las corrientes. En lo relativo a la primera, la Empresa ya construye una planta de energía de las olas mediante la tecnología Pelamis P2. El Pelamis P2 es una infraestructura en forma de serpiente capaz de absorber la energía de las olas del mar y convertirla en electricidad a través de unos cilindros hidráulicos.

En cuanto a energía de las mareas, está llevando a cabo, junto a las empresas austriacas Andritz Hydro Hammerfest y francesa Alstom, un proyecto de hasta 10 MW en el estrecho de Islay, en Escocia, que incorporaría sendos dispositivos similares al de un aerogenerador terrestre, pero que sustituyen el efecto del viento por el de las corrientes marinas.

Estas dos plantas se están desarrollando en el Centro Europeo de Energía Marina (EMEC), situado en la isla de Orkney, en el norte de Escocia.

IBERDROLA INGENIERÍA e una de las principales empresas del mundo en su sector y su actividad principal es realizar trabajos llave en mano tanto para otras sociedades del GRUPO como para terceros en las áreas de generación, nuclear, redes y renovables.